Formulario de Reunión Grupal

Una reunión grupal es una excelente manera de averiguar cuáles son los problemas que enfrentan las personas trabajando en limpieza. Y es una excelente manera de organizarse, identificar y desarrollar liderazgo y actuar para generar cambio. A continuación, encontrará más información para ayudarla/o a organizar una reunión grupal exitosa.

¿Quién debe asistir?

Invite entre cinco y doce cleaners. Pueden ser miembro/os de su sindicato u organización, o personas externas.

Roles

Asigne roles: un facilitador, un cronometrador y alguien que lleve el registro.

El facilitador lleva adelante la reunión y hace que todas/os se sientan cómodas/os y bienvenidas/os. Se aseguran de que todas/os tengan la oportunidad de hablar y pueden alentar a las personas haciéndoles preguntas o preguntas de seguimiento. Abren y finalizan la reunión (ver más abajo).

El cronometrador monitorea el tiempo e informa al facilitador. Si se les pide a todos que compartan una historia dentro de un período de tiempo, el cronometrador hace que cada orador se ajuste a esta condición.

El encargado del registro toma notas en el formulario que encontrará a continuación y registra los detalles de las/os participantes. Las notas no necesitan ser 'minutas' sino solo una o dos líneas para recordar lo que cada persona ha compartido. Ayudará a identificar los temas que se repiten comúnmente.

Procedimiento

Una reunión grupal suele durar entre 60 y 90 minutos.

Puede ser en línea o en persona, según cual sea la mejor manera de involucrar a las personas y los consejos/regulaciones de Covid al momento de la reunión.

Cómo empezar

El facilitador da la bienvenida a las personas y explica el objetivo de la reunión, por ejemplo:

“Bienvenidas/os a nuestra reunión grupal. Esto es parte de una campaña de escucha que tiene como objetivo hablar con 500 trabajadoras/es de limpieza sobre los problemas que les preocupan y las cosas que quieren cambiar en su trabajo. Somos parte de una coalición de grupos que representan o apoyan cleaners que están trabajando juntos para mejorar el trabajo en limpieza".

Luego, el facilitador invita a todos a presentarse (indicando su nombre, dónde trabajan y algo que les gustaría compartir sobre ellos mismos; podría ser un pasatiempo, idiomas que hablan, algo que hayan hecho recientemente, etc.).

Después de la ronda de presentaciones, el facilitador explica que la información que brinden las personas en la reunión se utilizará para recopilar datos e historias anonimizados, y verifica el consentimiento de todos para que su información se use de esa manera. Es posible que desee grabar la sesión si todos están contentos con eso (esto solo se usará para fines internos).

Compartiendo historias y experiencias

Luego, el facilitador les pide a todos que respondan la misma pregunta. Para nuestra Campaña de Escucha, sugerimos la pregunta: “¿Cuál es el mayor problema laboral que te afecta a ti, a tus compañeras/os o a las personas cercanas a ti?”. Luego, pide a cada persona que responda por turnos con 3 minutos para hablar cada una/o.

La clave es asegurarse de que las personas se escuchen entre sí con respeto y sin interrumpir, y que todas/os tengan la oportunidad de compartir.

Cuando las personas comparten, asegúrese de que sean específicas sobre los problemas que encuentran en su trabajo para que podamos comprender el problema. También es bueno alentar a las personas a compartir historias para extraer testimonios poderosos que podrían impulsar las comunicaciones de la campaña. Para asegurarse de que las personas sean específicas y compartan historias, es bueno que el facilitador sea el primero en responder a la pregunta en cada ronda, ejemplificando lo que está buscando.

Discusión

Una vez que todos hayan compartidos, si tiene tiempo, puede volver a algunos de los problemas planteados y ver si son problemas que otras personas tienen en común. De esta manera, puede tener una idea de cuan extendidos son algunos de los problemas.

También puede preguntar a las personas qué han intentado hacer al respecto. Esto le permite comenzar a identificar líderes potenciales en el grupo, que tal vez ya se estén organizando en su lugar de trabajo.


Pasos siguientes y cierre

Una vez que el tiempo llega a su fin, es hora de cerrar la reunión. El facilitador debe agradecer a todos por asistir y reconocer que puede ser difícil compartir experiencias en público. Debe recordar a todos que esto no es como un grupo focal en el que los profesionales / políticos ahora intentan solucionar los problemas (o ignorarlos), pero que estos problemas solo se resolverán a través de la acción colectiva, y que la acción dependerá de ellos tanto como de cualquier otra persona. Como resultado, es bueno dejar a las personas con un próximo paso por hacer. En esta etapa, estamos buscando personas que nos ayuden a llegar a más personas trabajando en limpieza, por lo que un buen paso siguiente es preguntarles si saben de otros cleaners que tengan problemas laborales y, de ser así, si pueden animarlos a completar la encuesta o la entrevista. O invítelos a una reunión grupal.

Para cerrar la reunión, puede ser bueno hacer una ronda de cierre donde todos compartan un sentimiento que tienen al final de la reunión. Esto puede ayudar a dar retroalimentación a los demás y dejar sentimientos (difíciles) en el espacio de la reunión.


Patrocinado por