Join the fight to repeal the AUMFs and demand healthcare not warfare
COVID19 shows that we are all connected across borders. Because systems of profit, violence, and militarism are global, our struggles against them must transcend borders as well. It's time to embrace a new understanding of safety and security that centers care, not state violence, coercion and war.
Governments continue to prioritize profit, exploitation, and repression over the needs of our communities. Weapons, sanctions, and walls do not keep us safe. What we need today is transnational solidarity, healthcare for all, guaranteed housing, and an end to the caging of people in prisons, concentration camps, and war zones. We must end U.S. wars.
In 2001 and 2002, the U.S. Congress passed the AUMF: the Authorization for the Use of Military Force. For nearly two decades, the 2001 AUMF has effectively become a blank check for any president, at any time, to wage endless global war without oversight or meaningful national public debate. U.S. counterterrorism operations from post-9/11 wars as a whole have expanded to at least 80 countries around the world, costing an estimated $5.9 trillion. Hundreds of thousands of people have been killed, injured, surveilled, and displaced, with Black, brown, and Muslim communities disproportionately impacted.
The 2002 AUMF allowed for the disastrous invasion and occupation of Iraq, and is being exploited to help provide false cover for Trump’s march to war with Iran. On January 30, 2020, the House, led by Rep. Barbara Lee and as a result of massive grassroots pressure, passed legislation to repeal the 2002 AUMF, but the Senate still has not taken action.
Our coalition, Racial Justice Has No Borders, wants you to join our campaign to immediately end the AUMFs that have been the pillar of escalated U.S. military intervention under the banner of the “War on Terror.” With your support and your signatures, we will be taking this statement to our decision-makers once they are back in session to build pressure on a full repeal and no replacement.
Together we can build a new anti-war movement, and work together across movements and borders to end wars at home and abroad. We pledge to join the fight to repeal the AUMFs. Our communities demand healthcare, not warfare!
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¡Únete a la lucha para revocar las autorizaciones para el uso de la fuerza militar (AUMF for sus siglas en inglés) y demandar cuidado de la salud, no guerra!
El COVID19 demuestra que todos estamos conectados más allá de las fronteras. Debido a que los sistemas de lucro, violencia y militarismo son globales, nuestras luchas en contra de ellos deben trascender las fronteras también. Es el momento de acoger una nueva forma de pensar acerca de la seguridad que se centre en el cuidado y no en la violencia estatal, la coerción y la guerra.
Los gobiernos siguen priorizando el lucro, la explotación y la represión por encima de las necesidades de nuestras comunidades. Las armas, las sanciones y los muros no nos mantendrán seguros. Lo que necesitamos hoy en día es la solidaridad transnacional, el cuidado de la salud de todas las personas, una vivienda garantizada, así como dejar de enjaular a las personas en prisiones, campos de concentración y zonas de guerra. Debemos terminar con las guerras en las que está embaucado Estados Unidos.
En 2001 y 2002, el congreso de EE.UU. aprobó dos AUMF, es decir, autorizaciones para el uso de la fuerza militar. Por cerca de dos décadas, la AUMF de 2001 se ha convertido en un arma efectiva que los presidentes pueden utilizar en cualquier momento para entablar guerras globales interminables sin la vigilancia o un debate significativo público a nivel nacional. Las operaciones contraterroristas que se realizaron en las guerras después del 11 de septiembre de 2001 se han extendido a por lo menos 80 países alrededor del mundo, con un costo estimado de $5.9 billones de dólares. Cientos de miles de personas han sido asesinadas, heridas, vigiladas y desplazadas, siendo las comunidades negras, de color y musulmanas las que han sido impactadas de manera desproporcionada.
La AUMF de 2002 permitió la invasión desastrosa y ocupación de Irak y Trump la está invocando como un pretexto en su marcha hacia la guerra con Irán. El 30 de enero de 2020, la Casa de Representantes, liderada por la representante Bárbara Lee y, como resultado de una presión popular masiva, aprobó una legislación para revocar la AUMF de 2002, sin embargo, el senado no ha tomado acción alguna para ello.
Nuestra coalición Racial Justice Has No Borders (La justicia racial no tiene fronteras) te hace un llamado para que te unas a nuestra campaña para acabar de inmediato con las AUMF, las cuales han servido como un pilar para el incremento de las intervenciones militares estadounidenses, bajo la bandera de la “guerra contra el terror”. Con tu apoyo y tu firma, llevaremos esta declaratoria a los que toman decisiones en materia pública, una vez que entren de nuevo en sesión, para ejercer presión sobre ellos y revoquen las AUMF por completo y no las reemplacen simplemente.
Juntos y juntas podemos construir un nuevo movimiento antiguerra y trabajar junto a otros movimientos y a través de las fronteras para poner fin a las guerras en casa y en el exterior. Nos comprometemos a unirnos a la lucha para revocar las AUMF. ¡Nuestras comunidades demandan cuidado de la salud, no guerra!
Firma para unirte a la lucha para ejercer presión inmediata sobre los que toman decisiones en materia pública para que se revoquen las AUMF por completo y no sean remplazadas.